Artículo de fecha 20 de septiembre del pasado año,

medio año antes del fiasco de Bankia que nos hunde mas de lo que estamos, por desgracia en esa fecha yo sin querer o queriendo o supòniendo intuia lo que ha sucedido, por el desastre que dejó en el FMI y su posterior abandono


11 Y 10 MILLONES (de lo que parece ser un delito y de lo que debiera serlo)


Si antes del verano hablábamos de la autoretribución que se fijo el triunviro de Bankia, y que alguien podría poner de ejemplo de que el canibalismo indirecto, puede ser la fase superior delcapitalismo salvaje en el que parece estamos. Y que aun cuando haya tratadistas como Tamames que creemos que abogan porque no haya un sueldo cuatro veces mayor que el del Presidente del gobierno, este tipo de abominaciones lo son aún mayores en la situación en que vivimos y no tienen ni restricción y menos sanción de ningún tipo.

Y esta es la única diferencia cualitativa con lo ocurrido con la CAM. Porque así como en ésta su triunviro se ha prejubilado con un total de 11 millones, que son algo más de 10 los que totalizan los tres de Bankia, en la CAM, al parecer habiendo delito ha empezado a intervenir la fiscalía anticorrupción.

Pero el gran Rato, con dos, se permite en Las Palmas, en un areópago del partido reaccionario(PSOE:conservador) proponer ligar los salarios con la productividad, que a lo mejor hasta en esta coyuntura puede ser necesario, conveniente o ambas cosas.

Pero si tuviera alguna validez la idea, queda fulminada si la aboga quien debiera hasta como elemental prudencia permanecer en silencio, tras su impiedad retributiva, e invalidándose más si cabe, al introducirse en ese” juego”, con la representación que tiene, insoslayable, del “primer banco de la nueva banca”, que sin querer puede pensarse que es más de lo mismo,bancos que pueden ser cajas, o sea el desastre en potencia por su politización. Y no se nos puede olvidar de que para que sirvió y nos sirvió su presencia el FMI. Alguien ha hablado de prestigios vacios o la nada con sifón , pero aquí pudiera ser nítrico con sifón.

Y no nos olvidemos de González Pons, -también en éste areópago- y sus sonrisas, que pueden ser las del nuevo régimen (mas que gobierno) monclovita, o sea salvando cronotopos, un poco equivalente al ministro Solís, que fue la sonrisa del franquismo.

Rafael A. Arnanz
Dr. en Derecho y C. Políticas